Día 3 y 4: New York - Día libre
Día libre. Seguro que queréis más pues Nueva York no deja a nadie indiferente. En Manhattan encontraréis de todo: cultura con sus numerosos y afamados museos; iconos como la Estatua de la Libertad, el Empire State Building o el Puente de Brooklyn; entretenimiento con sus numerosos locales de ocio y una variada selección de espectáculos de Broadway o sus barrios, cada uno con una multiculturalidad apabullante. No olvidéis de pasear por sus nuevos desarrollos como Hudson Yards, el distrito Meatpacking o el High Line. Disfrutar de su ilimitada oferta gastronómica desde los perritos calientes hasta la más alta cocina internacional, pasando por las delicias de cocinas exóticas de casi cualquier parte del mundo. Si queréis dar un vistazo a los otros barrios de Nueva York, te recomendamos la Visita de Contrastes, durante la que recorreréis Bronx, Queens y Brooklyn, donde conviven diferentes culturas y estilos de vida. Si buscáis un experiencia auténtica, dedicar la mañana del domingo a una vista a Harlem y asistir a una ceremonia Gospel. Y si prefieres algo de compras, además de todas las opciones que encontrarás en la Gran Manzana, podréis acercaros a Jersey Gardens, en la otra orilla del río Hudson, donde no se aplican impuestos a la ropa o el calzado.